Lleidatans per la Igualtat i la Custòdia Compartida no és una associació, tan sols un grup de persones que realitzem aquest bloc i diverses activitats a la nostra ciutat, amb la intenció de denunciar de manera pública les injustícies que pateixen els pares separats, davant d'una llei desigual i injusta. Us convidem a col • laborar de forma activa amb aquest mitjà informatiu, podeu fer-ho enviant notícies, escrits o el que considereu oportú, aquest espai està obert al debat, per la qual cosa considerem que la teva opinió és important.

Podeu col.laborar enviant el que us vingui de gust a: custodiaresponsable@gmail.com

Gràcies per col.laborar


El negocio de la negación del SAP.

viernes, 28 de agosto de 2009

Una vez más me ha llegado el minucioso estudio realizado sobre las supuestas mentiras del SAP, que se puede encontrar en la Web de Mujeres en Red – El Periódico feminista, con el título de ¿Qué y quien se esconde tras el I Congreso Internacional de Síndrome de Alienación Parental y Custodia Compartida?.

Por mi experiencia personal, siento una enorme tristeza al comprobar cómo hemos sido capaces de educar a unos seres tan egoístas, los cuales, amparándose en el supuesto bien superior del menor, ni tan siquiera saben lo que significa la palabra MADRE y utilizan a esos niños para obtener unos inmensos beneficios económicos, sin importarles lo más mínimo el sufrimiento que esos mismos niños están padeciendo.

Evidentemente si este escrito llega a manos de las mal llamadas feministas, arremeterán contra él alegando que ha sido escrito por un hombre. ¡Nada más lejos de la realidad!.

Puedo dar fe de que soy mujer y feminista convencida de toda la vida, que jamás se ha querido beneficiar de su condición de mujer para ser librada de tareas que podrían resultarme pesadas, que he demostrado que puedo trabajar igual que cualquier hombre (salvo en casos que por mi constitución física sea totalmente imposible, aunque no por eso habré dejado de intentarlo). Que jamás mis “días malos” han sido un impedimento para asistir al trabajo por muy mal que me encontrara y que, una vez madre, he buscado la manera de compaginar con el padre de mis hijos el cuidado de los niños cuando éstos han estado enfermos para no tener que faltar al trabajo. Porqué su padre está tan capacitado como yo para cuidarles.

Yo también me he separado y, al contrario que muchas mujeres, he compartido la custodia de mis hijos con su padre y ellos han vivido la mayor parte del tiempo en el que fue hogar conyugal con él, pasando yo a satisfacer una pensión adecuada a la MITAD de las necesidades de los niños. Y, evidentemente, habiendo liquidado previamente la vivienda.

Evidentemente, de haber querido, habría podido instar una separación contenciosa y a día de hoy estar disfrutando del uso y disfrute de la vivienda conyugal percibiendo una elevada pensión para los niños y habiéndomelo quedado todo a cambio de convertirme nuevamente en una mera cuidadora de niños, dejando mi vida laboral y mi futuro muertos para siempre y con la imperiosa necesidad de ser mantenida por un hombre por el resto de mis días.

¡Pero no! ¿De qué me habría servido todo eso?. Si hubiera “peleado” por cuidar yo sola de los niños, en caso de desear seguir trabajando (muchas horas, por cierto), esos niños indefectiblemente tendrían que ser cuidados por sus abuelos o por canguros, mientras que su padre, por su condición de autónomo, podía compaginar su trabajo con la atención a los niños. ¿Alguien conoce la historia del Rey Salomón, en la que la verdadera madre renunciaba a su propio hijo antes que fuera cortado por la mitad por ese sabio Rey?. Pues se trata de eso: de pensar con la cabeza que será lo mejor para nuestros hijos. Y si lo mejor es “renunciar” a ellos por su bien, pues se hace. ¿Alguien es capaz de imaginar cómo es para una madre la primera noche de separada el hecho de acostarse sin poder dar el habitual beso de buenas noches a sus hijos cuando éstos ya están dormidos?. Estoy convencida de que sólo un padre es capaz de imaginarse ese trance por haberlo vivido en primera persona. Pero eso no quiere decir que yo soy una mala madre. Los quiero con locura, de la misma manera que estoy convencida que también les quiere su padre y, afortunadamente, hoy los dos son mayores de edad y, en breve, mi hija mayor va a convertirme en feliz abuela.

Por otro lado, tengo una nueva pareja con la cual, por desgracia, todavía no puedo convivir y el cual también tiene 2 hijos, menores que los míos. Me llena de tristeza comprobar como el principal objetivo de dicha madre es expoliar al padre y manipular a esos pobres niños para lograr sus objetivos sin importarle lo más mínimo lo que los niños están padeciendo. Una madre que, la mayor parte de los días, por pereza, deja a los niños a dormir a casa de los abuelos para evitar tener que levantarse cada día media hora antes para atenderlos antes de ir al trabajo. Una madre que, a partir de las 10 de la noche dice literalmente que ese tiempo es para ella, debiéndose ocupar esos mismos niños de preparar su propia cena y cenar ellos solos mientras su madre está chateando en el ordenador y con una capacidad para beber cerveza mucho más alta de lo verdaderamente deseable. Una madre que, con mentiras, adecua sus vacaciones estivales para poder irse de viaje con sus amigas y sin sus hijos, disfrutando de la compañía de los niños 4 días escasamente contados y debiendo dejar nuevamente a los niños con los abuelos por haber agotado sus vacaciones.

Me entristece también comprobar cómo esos niños, especialmente el mayor, por su carácter introvertido, tiene muchos problemas de comportamiento y que su madre, a pesar de tener un informe de un psicólogo que le aconseja una terapia para ese niño y a pesar de ser enfermera, nada ha hecho al respecto.

Me cuesta comprender que una mujer (que todos sabemos que no somos ningunas santas), una vez separada sea incapaz de reorientar su nueva vida sin necesidad de odios ni venganzas que no llevan a ninguna parte y que, en la mayoría de los casos, son injustificados.

Las mujeres, la mayoría, rehacen su vida y encuentran que es totalmente lógico. Nadie niega que lo sea. Pero todo está bien mientras ellas lo hacen y pueden ver a su ex pareja sola y abatida, para poder pensar y hacer ver a sus allegados que “el pobre no es nadie sin mí”. El problema real empieza cuando su ex pareja, a su vez, rehace su propia vida. En estos casos el orgullo puede más que la cabeza y entonces ven necesario obstaculizar en lo posible esa nueva relación, ya sea a base de denuncias sobre hechos inexistentes, o a base de malmeter a los propios hijos contra la nueva pareja de su padre, convirtiendo a esos mismos niños en tiranos.

¿Que clase de niños estamos educando?. ¿Alguien se ha parado a pensar que esos mismos niños cuando sean mayores engañaran, mentirán y robarán sin pudor porqué es la educación que se les está dando?. ¿Cómo podemos pretender que esos hijos, los varones, no sean una nueva generación de machistas que no se involucrarán en el cuidado y la educación de sus propios hijos puesto que su madre les ha enseñado que el padre no es nadie y que es la madre quien siempre manda y decide?.

Pena me dan esas mismas madres cuando lleguen a la vejez y reciban de sus propios hijos lo que ellas han cultivado.

M. CARME CARREÑO

Detenida una mujer por matar a cuchilladas a su compañero sentimental

EFE MADRID - 27-08-09

Agentes de la Guardia Civil detuvieron anoche en el municipio madrileño de San Martín de Valdeiglesias a una mujer acusada de matar a su pareja, un hombre de 48 años, al que dio una cuchillada en una ingle y que falleció dos horas después de la agresión en el hospital de Alcorcón.

Según han informado a Efe fuentes de la Guardia Civil, el suceso se produjo alrededor de las 11.00 de la noche en un piso situado en el número 2 de la travesía de San Carlos, en la localidad de San Martín de Valdeiglesias, al suroeste de la Comunidad de Madrid.

A la llegada de los agentes de la Guardia Civil los facultativos del Summa ya se habían hecho cargo del herido, que presentaba una herida por arma blanca en la región inguinal (ingle) y tenía afectado la femoral, ha informado Emergencias 112-Comunidad de Madrid.

El hombre fue trasladado en una UVI móvil del Summa al hospital de Alcorcón, pero apenas dos horas después de su llegada al centro fallecía a causa de la gravedad de la herida.

Los agentes de la Guardia Civil recogieron el cuchillo objeto del delito y detuvieron en el domicilio a la presunta autora de la agresión, una mujer de 38 años, pareja de la víctima, que próximamente pasará a disposición judicial.

La violencia que no va a juego

jueves, 27 de agosto de 2009

LUIS MIRANDA. Me quedé esperando en vano las concentraciones de repulsa, los discursos emotivos y los lazos de tonos pastel para condenar el asesinato de un hombre a manos de su mujer la semana pasada en Valencia. Los periódicos, húerfanos en agosto de titulares y polémicas, sí que lo contaron, pero a base de edulcorarlo con atenuantes y denuncias de maltrato anteriores, como para absolver a la sospechosa alegando legítima defensa y hasta apelando a la segunda enmienda estadounidense y a la Ley del Talión si hiciera falta.

Lo más normal, sin embargo, es que el caso hubiera pasado desapercibido, cubierto por un piadoso manto de silencio o hasta enmascarado con la vieja etiqueta franquista del crimen pasional, como pasó con los 31 hombres que el año pasado murieron asesinados por sus compañeras y a los que velaron, quizá por fortuna, sin lágrimas oficiales de cocodrilo ni palabras vanas ni micrófonos a las puertas de sus casas ni faldones invitando a llamar al 016. También, y ésto es más grave, sin que nadie reconozca que la violencia de pareja también se ejerce en el sentido contrario del que siempre señalan las asociaciones que comen de las mismas administraciones a las que tienen en un puño. Las más de las veces se ocuparán de señalar la marginalidad y extranjería de los protagonistas, recordando aquella pamplina de la culpa de la sociedad y el individuo, y que rara vez emplean cuando es a la inversa.

El raro Ministerio que dirige Bibiana Aído tiene una buena excusa para echar tierra, porque los 31 muertos que contó el año pasado el Consejo General del Poder Judicial le hacen feo en su decorado de trajes de chaqueta a juego con el fondo malva. Sí es verdad que las mujeres asesinadas son el doble, pero reconocer que también las hay que cogen el cuchillo o encargan a un sicario la faena tiraría por tierra el acogedor mantra de la violencia de género, un sintagma nominal que partiendo de una barbaridad gramatical manipula la realidad para conseguir pocos efectos beneficiosos y bastantes perniciosos.

Pensar en las mujeres que matan a sus compañeros obliga también a tener en cuenta que otras sacarán la mano de paseo cada vez que se les crucen los cables, que muchas los amenazarán cuando se separen y que otras los humillarán sin necesidad de ponerles la mano encima. Como hacen muchos más hombres con sus esposas, desde luego, sin que unos merezcan mejor trato que otras.

Y si se empieza estudiando todo ésto, a lo peor se llega a concluir que la Ley de la Violencia de Género y la cursi mentalidad que florece regada por su dotación presupuestaria no son para hacer justicia, sino para pelear a una parte de la sociedad con otra, para responder al mal del machismo atávico heredado con un feminismo mucho más sutil pero igual de injusto y tendencioso, como llevando la igualdad al absurdo.

Ni siquiera podrán recurrir al cínico argumento de tolerar algún atropello para conseguir los fines. En el pecado llevan la penitencia de una ley que no sólo criminaliza a una persona con un simple testimonio en contra, que no sólo abre el coladero a que tantas arpías denuncien o chantajeen para asegurarse la custodia de los niños, la casa, el coche y la mitad de la nómina ajena. También, y no lo reconocerán nunca, sirve para colapsar los juzgados con denuncias falsas que dejan desguarnecidas a la intemperie a las mujeres que de verdad necesitan que las protejan de un destino tan cruel y tan injusto como el de la chica embarazada a la que un indeseable mató de un disparo hace pocos días.

La Policía detiene a una mujer en La Línea acusada de malos tratos a su marido

miércoles, 26 de agosto de 2009

  • Una mujer de 29 años ha sido detenida por un presunto delito de malos tratos contra su marido.
  • Los maltratos, físicos y psicológicos, se producían ante su hijo.
  • El hombre asegura que si no ha denunciado antes es porque la mujer lo amenazaba con autolesionarse para, después, denunciarlo a él.
  • Teléfono gratis de ayuda sobre violencia doméstica: 016.

La Policía Nacional informó este lunes de la detención de una mujer de 29 años como presunta autora de un delito de malos tratos en el ámbito familiar, supuestamente cometidos contra su marido en la localidad gaditana de La Línea de la Concepción.

En un comunicado, la Comisaría linense explicó que la detención se produjo después de que el marido presentara una denuncia afirmando que recibía de su esposa malos tratos físicos y psíquicos en presencia de un hijo de ambos, de dos años de edad.

Según manifestó el denunciante, en varias ocasiones la mujer le había arañado el rostro, no pudiendo salir de su domicilio hasta haber curado sus heridas. Esta situación, afirmó, se venía produciendo desde hacía tiempo.

Autolesionarse


En este sentido, explicó que no había denunciado antes la situación porque su esposa le amenazaba con autolesionarse para, posteriormente, denunciarlo a él ante la Policía, "teniendo ella todas las de ganar", apuntó.

Así las cosas, los funcionarios policiales procedieron a la detención de la mujer, que fue puesta a disposición de la autoridad judicial como presunta autora de un delito de malos tratos en el ámbito familiar.

www.PapaNoes.org en las Fiestas de Bilbao, por la Custodia Compartida

martes, 25 de agosto de 2009

Un grupo de padres hizo su aparición en las fiestas de Bilbao. Como todo este verano, nuevamente estos infatigables papás, vuelven a salir a la calle, con su traje de Papa Noel, su pancarta y un arma con una onda expansiva incalculable, el amor hacia sus hijos. Sus vestiduras tapan sus caras, no necesitan ser reconocidos, pues su labor es un reconocimiento que no se puede expresar ni en palabras ni actos, va mucho más allá. Desde Lleida per la Custòdia Compartida, queremos agradecerles su incansable trabajo, un trabajo que seguro estamos, dará sus frutos, pero sobretodo queremos agradecerles en nombre de todos nuestros hijos, sus actos.

Adelante por la custodia compartida, ¡NO HAY QUIEN NOS PARE!

Os dejamos con unas lindas fotos que a muchos de nosotros nos llena de esperanza e ilusión, de auto confirmación en esta larga y dura lucha, estamos en el bando de la justicia y evidentemente el vencedor.






Casi 2.000 abuelos andaluces están separados de sus nietos, según una asociación

lunes, 24 de agosto de 2009

En Andalucía, entre 1.500 y 2.000 abuelos están separados de sus nietos, tienen problemas para verlos o no pueden mantener con ellos una relación familiar normal, según ha dicho a Efe la portavoz de la Asociación Abuelos Separados de Sus Nietos, Guadalupe de la Fuente.

EFE


Sevilla.- En Andalucía, entre 1.500 y 2.000 abuelos están separados de sus nietos, tienen problemas para verlos o no pueden mantener con ellos una relación familiar normal, según ha dicho a Efe la portavoz de la Asociación Abuelos Separados de Sus Nietos, Guadalupe de la Fuente.

En la mayor parte de los casos se trata de abuelos paternos que, tras el divorcio de sus hijos varones, con la consiguiente pérdida de la custodia de los niños, pierden el contacto con sus nietos, según De la Fuente, quien dijo que los abuelos maternos sólo se ven en esta situación en caso de la muerte de la madre de los menores, un número muy reducido de casos.

También se dan situaciones de "extorsión" por parte de los padres de los menores hacia los abuelos -hacia sus propios padres-, a los que impiden ver a los nietos si les niegan una ayuda económica o por cualquier otro motivo, castigándoles sin ver a los niños.

En los casos en los que los abuelos recurren a los tribunales para que se les permita ver a sus nietos, se les suele conceder o dos horas a la semana u ocho horas de un domingo al mes, según explicó De la Fuente.

Pero la mayoría de los abuelos renuncia a recurrir a los tribunales porque, también en la mayoría de los casos, estas situaciones se producen en padres de varones divorciados que pierden la custodia de los menores, por lo que consideran, según De la Fuente, que recurrir al juez empeorará la situación o que de ese modo interfieren en cuestiones de la pareja recién separada.

"Hay abuelos que llegan a desplazarse en taxi a las puertas de los colegios para ver a los niños, lo que hacen con miedo y a escondidas", aseguró De la Fuente.
La portavoz de la asociación se quejó de que ninguna Administración haya emprendido ninguna campaña de concienciación "para que no se manipule a los niños", del mismo modo que en los últimos años se ha hecho con el maltrato doméstico y la necesidad de denunciarlo.

También ha lamentado que su asociación no reciba ninguna subvención y que cuando las reclaman obtengan la misma respuesta, que, según De la Fuente, es "no hay dinero para los abuelos".

Estas ayudas son precisas para un colectivo que, por su avanzada edad en buen número de sus miembros, ni siquiera sabe utilizar internet para entrar en contacto con la asociación o informarse de qué pueden hacer cuando se ven privados de sus nietos y que, también por su edad, al afrontar este tipo de situaciones entran con frecuencia en un rápido deterioro físico y psíquico, según explicó la portavoz.

La Asociación Abuelos Separados de Sus Nietos está en contacto con la Cruz Roja para que abuelos de esta asociación o afectados por este problema pueden emplear sus instalaciones en actividades de terapia ocupacional.

De la Fuente añadió que estas situaciones también perjudican gravemente a los menores, "a los que se les enseña que todo vale, y que también se puede mentir", por lo que cuando alcancen la mayoría de edad podrán repetir estos esquemas de comportamiento.

La portavoz admitió la imposibilidad de calcular con precisión el número de abuelos que padecen este problema, aunque señaló que si, sólo el año pasado, se produjeron 150.000 divorcios en España, al menos 2.000 abuelos lo sufren anualmente.

También dijo que la Asociación no descarta convocar a los abuelos separados de sus nietos a manifestarse en demanda de un cambio de la ley que impida estas situaciones, y anunció que estarán presentes en la manifestación prevista en Madrid el 27 de septiembre contra las denuncias falsas en el ámbito familiar.

¿Qué género de violencia?

viernes, 14 de agosto de 2009


Olga Hernández
Escritora

Aquí, en Matrix, no creo en la violencia de género. Cuando digo esto de viva voz, no hace falta que me esfuerce por ir más allá pues casi nunca me dejan explicar el por qué.

Conozco muchas víctimas, muchísimas. Sobre todo son mujeres. Pero también hay muchos niños, muchos ancianos y algunos hombres, los suficientes para que Cristina Almeida pueda hacer un chiste. Seguramente un pediatra conocerá un porcentaje mayor de niños y un geriatra, mayor de ancianos. Lo que es impepinable es que para atacar un problema, incluso simplemente para sugerir una hipótesis con la que ponerse manos a la obra, hay que saber de qué se está hablando. Los profesionales que podrían ayudar prefieren no involucrarse por miedo a que alguien les golpee en la cabeza con la teoría oficial: asistentes sociales, maestros, geriatras, pediatras, jueces, abogados, etc.

La situación es peor de lo que parece, que ya es decir.

Mueren hombres, mujeres, ancianos y niños paradojicamente a manos de quienes deberían cuidarles y defenderles. Mueren en un lugar al que llamamos hogar y donde una quiere pensar que, del tranco para adentro, no hay enemigos. Para dorarles la píldora a las/los defensoras/es de las teorías de género -que no para ayudar a las mujeres- se ha constituido un tipo penal privilegiado que contempla exclusivamente el caso en que un hombre ataca a una mujer obviando a los demás sujetos victimizables que suelen habitar en un hogar. Sólo construimos un tipo porque sólo habíamos previsto un nombre -violencia machista- y así las violencias expósitas y anónimas permanecen huerfanas de atención y de justicia en tanto que las que tienen nombre no se frenan. ¿Cómo hay que denominar al doble parricidio de Burgos? ¿Violencia feminista? El planteamiento en sí mismo es aberrante.

Las Aído de este mundo van, como Caperucita Roja, por una senda que no conocen, eligiendo las florecillas que les gustan y que se adaptan a su prototipo de ramito campestre. A ambos lados de la senda hay una muerte y un dolor que no sirven ni para que Caperucita reconsidere su irresponsable deambular por el bosque, ni para que aprenda algo sobre ecología. Y más muertes, y más dolor.

De paso que hemos sido injustos hasta lo imperdonable ignorando a una parte de las víctimas, hemos mandado a la porra la preciosa ayuda que podía prestar la mitad de la población - los hombres- a la hora de garantizar la seguridad de las personas que están en situación de riesgo. Es de temer que los sujetos del género criminal, sospechosos de cometer en cualquier momento un crimen infecto por el mero hecho de su condición sexual, no se sientan con la moral necesaria para arriesgarse a pasar por la situación de un héroe como Jesús Neira. De esta forma, las víctimas a quienes les ha correspondido el regalo de nuestra atención ahora están más inseguras.

Pero da igual, seguimos insistiendo en teorías cuya solvencia se esfuma con un mero vistazo a la historia reciente. Si algo tenía el franquismo eran dos modelos muy claritos: el del rol masculino y el del rol femenino. ¿Por qué la educación en estereotipos de género no daba lugar a esta violencia desatada? Los que hayan contestado que sí -que daba lugar a cosas peores pero no nos enterábamos porque no había libertad de expresión- expliquen por qué, entonces, estamos tan asustados como si lo que ocurre ahora constituyese una espeluznante novedad.

Menos mal que aún nos queda la prevención. Ya saben, los colegios, EpC. Llevo años preguntándome por qué los derechos fundamentales quedan en suspenso cuando eres un niño y estás en el colegio. La figura que encarnaba la autoridad, el maestro, hace tiempo que ha sido neutralizada y no puede -porque ya nos hemos encargado de que eso sea así- proteger a los débiles de los fuertes. Gracias a EpC, si inoculamos la dosis necesaria de ideología de género, tal vez logremos que el bosque se acabe pareciendo a nuestro ramito. Entonces lo podremos guardar en nuestro cestito y ponerlo en nuestro jarroncito al llegar a casa.

Aquí, en Matrix, conozco bien el drama de las víctimas de violencia en el hogar pero casi nunca puedo explicarlo en voz alta porque no encaja en la verdad oficial.

Violencias de género

*Manuel Ruiz Zamora

EL pasado día 7 de este mes de agosto una mujer de 27 años fue detenida en Burgos tras asesinar a su propia madre, a la que había arrojado a un descampado a diez kilómetros de la ciudad, y ahogar a su hijo de tres años de edad. Ese mismo día ingresaba en prisión otra mujer, que unos días antes había abandonado durante toda la noche a su bebé de diecisiete meses en un cañaveral para poder acusar a su ex marido de secuestro. No han sido los únicos sucesos de violencia protagonizados por mujeres este verano.

En Murcia, apenas un par de días antes, una mujer mató a su hija, deficiente mental de unos treinta años, y después intentó suicidarse. Un poco más arriba, en Sueca, Valencia, una chica había, en los días últimos de julio, apuñalado a otra en la puerta de una discoteca. Los servicios de urgencia no pudieron hacer nada por salvar la vida de la víctima. Ese mismo día, en Arcos de la Frontera, Cádiz, otra chica se quitaba la vida después de haber ahogado a su hijo de año y medio.

No es inusual encontrar noticias en las que los recién nacidos son víctimas de sus propias madres. A finales, asimismo, del pasado mes de julio, una mujer ucraniana fue detenida en Barcelona por el homicidio de su hijo. "Una mujer mata a su bebé en El Masnou e intenta suicidarse", "detenida la madre del bebé abandonado en un contenedor de basuras en Almería", son algunos otros titulares encontrados al azar a este respecto. Es preciso aclarar, sin embargo, que si alguien tiene la ingenuidad de buscar en internet alguno de estos casos acotando la búsqueda mediante la fórmula "violencia doméstica" o "violencia de género", tan sólo hallará sucesos en los que los verdugos son indefectiblemente hombres y las víctimas indefectiblemente mujeres.

Y, sin embargo, también los hombres son ocasionalmente víctimas de la violencia de las mujeres. En mayo de este mismo año, una mujer de La Coruña mató a su marido y se entregó después a la Policía. Unos días después, en Madrid, una mujer peruana mató a su marido "harta de sus palizas", según entrecomilla el periodista en el titular de la noticia, tomando partido implícitamente por la versión de la presunta asesina. Esa tendencia más o menos inconsciente a introducir elementos de justificación cuando según qué tipo de crímenes son cometidos por mujeres contrasta con la absoluta ausencia de información acerca de las circunstancias biográficas o psicológicas que rodea a los agresores masculinos, reducidos apenas a la condición de bestias infrahumanas.

Ninguna de estas mujeres, sin embargo, constarán como agresoras en las estadísticas sobre violencia de género, ni ninguna de sus víctimas, aún siendo mujeres, podrían haberse beneficiado de la atención especializada que dispensan los juzgados de violencia contra la mujer. Aunque según señala el informe, publicado el 27 de febrero de este año, del Consejo General del Poder Judicial, el 25,6% de los fallecidos por violencia doméstica y de género son hombres, y que en el año 2007, por ejemplo, 10.902 denunciaron ser víctimas de violencia por parte de sus parejas o sus ex parejas, si alguien se molesta en consultar los datos que ofrece el Ministerio de Igualdad tan sólo encontrará agresores masculinos y víctimas femeninas, como si lo contrario fuera un imposible ontológico.

A tal respecto, resulta casi un sarcasmo que un Ministerio, cuya máxima responsable pasará, sin duda, a la historia de lengua española por haber parido la palabra miembra, y que se caracteriza por la orwelliana pretensión de imponer universalmente la neolengua de lo políticamente correcto, recaiga, sin embargo, a la hora de aportar datos sobre este tema, en un recalcitrante sexismo en donde ya nada es a/o, sino estrictamente masculino o femenino, según sean víctimas o verdugos, excluyendo cualquier otro tipo de casuística que pudiera poner en evidencia la inconsistencia de este constructo y, lo que es peor, discriminando a muchas de las víctimas, incluso femeninas (en el caso de las lesbianas, por ejemplo), en función del sexo de su agresor.

Sobre el tema de la mujer estamos construyendo uno de los grandes mitos de nuestra época, y creando una especie de ente de ficción con tan poca consistencia real como el de aquel tipo angelical, etéreo y, afortunadamente, inexistente que nos legó la mitología romántica. Lo peor, no obstante, es que alrededor de este mito se está entretejiendo toda una tupida red de organismos e intereses, puramente materiales, que nos perjudica tanto a los hombres como a las mujeres, en términos de libertad, en términos de igualdad y en términos de fraternidad. En este sentido, muchos y, cabe decir, muchas de los que, por formación y por convicción, hemos considerado siempre una obviedad incontestable la intrínseca igualdad de hombres y mujeres, asistimos no sólo con perplejidad sino con preocupación a esta especie de diferenciación ontológica a partir de una categoría metafísica tan discutible como la de género, que rompe ideológicamente con la única identidad que es admisible desde un punto de vista verdaderamente progresista: la de ser humanos, demasiado humanos.

La justicia empieza a dar también al padre la custodia de los hijos

martes, 4 de agosto de 2009

En España existe un maltrato institucional hacia el varón por serlo, los Gobiernos de Cataluña y Valencia impulsan la coparentalidad.
Algo está empezando a cambiar en España en las sentencias de separación y divorcio. Cada vez es menos excepcional que los jueces acuerden la custodia compartida de los hijos cuando los progenitores no se ponen de acuerdo en lugar de otorgársela casi siempre a las madres. Y son precisamente las juristas -juez, fiscal o abogada- las que están tras esas sentencias que reconocen la implicación previa del padre en la educación de los hijos mientras duró la pareja y la necesidad de que siga así tras la ruptura.

Los abogados de familia constatan que, desde hace poco más de un año, existe un goteo de sentencias en este sentido, aunque es imposible de cuantificar, pues el Consejo General del Poder Judicial no elabora una estadística de este fenómeno a diferencia de lo que ocurre con otras realidades sociales que afectan a la mujer. En los últimos días han trascendido dos resoluciones que avalan la tendencia. La primera, dictada por la Audiencia de Barcelona, respalda la custodia compartida que impuso la juez de familia, a propuesta de la fiscal, a la vista del desacuerdo de los padres: cada uno reclamaba para sí los niños, entonces muy pequeños.

"La novedad de la sentencia es que va más allá de la petición de las partes y que refleja la coparentalidad que había antes de la ruptura", apunta Elvira Rodríguez Sáenz, la abogada del padre, especializada en derecho de familia. "Los jueces tienen una potestad sobre los menores y deben ejercerla, han de salirse de la norma habitual si se dan determinados supuestos", añade. El texto judicial relata cómo ha ejercido la paternidad Manuel Guaita, de 47 años y agente de aduanas. Cuando estaba casado, solicitó la reducción de jornada hasta el máximo de cuatro horas que permite la ley. Fue él quien se ocupó por las noches de la lactancia artificial del pequeño de sus dos hijos, que nació prematuro. Y era quien los llevaba al médico y los recogía del colegio y las actividades extraescolares, pues la madre es una empresaria a la que su trabajo no se lo permite.

La resolución se produce en el marco de una ley del divorcio que dice que la custodia compartida se concederá "excepcionalmente" cuando los progenitores estén de acuerdo antes o durante el proceso judicial, o si el juez considera que así se protege mejor el interés de los menores. La excepcionalidad a la que alude se introdujo en una enmienda votada de madrugada en el Senado. Los representantes del PSOE dijeron en su día que votaron por error, pero lo cierto es que nunca se enmendó.

"En España existe un maltrato institucional hacia los hombres por su simple condición de serlo que es un cáncer social del que nadie se ocupa", afirma Cristina Tenas, portavoz de Asociación de Mujeres por la Igualdad y la Custodia Compartida. Y recuerda a los millares de personas que están sufriendo los efectos de la ley. "¿Quién les devolverá a esos niños la infancia robada? ¿Y esos padres que quisieron ocuparse de sus hijos y no les dejaron?".

La otra sentencia reciente la ha dictado una juez especializada en violencia de género, también con el beneplácito de la fiscal, y otorga la custodia compartida de dos niñas pese a que está pendiente de resolverse en ese juzgado la denuncia de la madre contra el padre por maltrato psicológico. Esta última sentencia resulta aún más significativa si se recuerda que el artículo 92.7 del Código Civil prevé que no procederá otorgar la custodia compartida cuando, entre otros motivos, "existan indicios fundados de violencia doméstica", lo que hace pensar que la juez pudo considerar que denuncia no tenía fundamento.

José Manuel, de 50 años y arquitecto de profesión, prefiere no identificarse porque la ex esposa no ha firmado aún el convenio regulador derivado de la sentencia. En su caso, las medidas provisiones le otorgaron a la madre la custodia de las dos hijas, que ahora tienen 10 y 12 años, pero ya le permitieron pasar dos días entre semana con ellas, al margen de los fines de semana alternos. En la práctica es una custodia compartida, pero entre algunos jueces existe cierto reparo a que la resolución lo recoja así de claro. No es sólo una cuestión semántica, porque ese reconocimiento implica también unas cargas económicas al fijar la pensión de alimentos y determina el uso de la que fue vivienda de la pareja. Pese a la ruptura, José Manuel siguió conviviendo en el mismo techo porque no se ponía de acuerdo con su ex para vender la vivienda y dos plazas de aparcamiento. Hasta que él se fue de vacaciones con las niñas y, cuando regresó, la madre le había cambiado la cerradura y le había denunciado por maltrato psicológico. La juez le dio 10 días para que abandonara el domicilio. Luego el caso estuvo paralizado unos meses, hasta que se celebró el juicio en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 5 de Rubí, especializado en violencia doméstica. Pese a haber una denuncia pendiente de resolución, la fiscal y los informes de los psicólogos informaron a favor de la custodia compartida.

"Me han salvado mis hijas porque siempre me he ocupado de ellas y nuestra relación es buenísima", explica. Fue él quien solicitó que juez y psicólogos entrevistaran a las niñas. "Sabía que dirían que querían seguir estando con su padre y su madre después".

Isidro Niñerola, presidente de la Asociación Española de Abogados de Familia, explica que se empieza a notar el cambio de tendencia de los jueces, sobre todo, de los jóvenes. "Hace uno o dos años era impensable que se concedieran custodias compartidas en los divorcios contenciosos".

También los abogados empiezan a tener otra actitud con sus clientes y ya no les quitan de la cabeza que pidan la custodia compartida, reconoce Niñerola. "Lo fácil es decirle a un padre que no se la van a dar o coger sólo a mujeres como clientas. Depende de las ganas de trabajar que tenga cada cual", explica Elvira Rodríguez. "Cada vez hay más clientas que te dicen que, desde que se han separado, sus hijos han ganado un padre que antes no tenían", añade la letrada. Niñerola lo ratifica. "Hay una nueva generación de madres divorciadas que ya no piensan que los hijos son sólo de ellas y que son conscientes de que necesitan espacios propios".

Menos optimista es el abogado José Luis Sariego. "Puede que algo esté cambiando, pero los jueces siguen siendo muy restrictivos". Fernando Basanta, presidente de la Federación Andaluza para la Defensa de la Igualdad Efectiva, apunta que "lo que hace falta es otro marco legal que regule la custodia compartida de forma clara". Hay ya dos autonomías, Cataluña y Valencia, que proyectan establecer una coparentalidad.


Lo que dice la ley-
Artículo 92.8 del Código Civil:

"Excepcionalmente, aun cuando no se den los supuestos del apartado cinco de este artículo [el acuerdo entre los padres logrado antes del proceso judicial o durante el mismo], el juez, a instancia de una de las partes, con informe favorable del Ministerio Fiscal, podrá acordar la guarda y custodia compartida fundamentándola en que sólo de esta forma se protege adecuadamente el interés superior del menor".